Digan lo que digan, pero esta caída es natural, es un proceso de desgaste con la llegada al poder, pero nunca en tiempos normales se está dando de tal magnitud. Sin duda el gobierno federal no ha hecho las cosas como muchos esperaban, sus programas son un cochinada, si es cierto, que entregan dinero a diestra y siniestra, pero no pega, son sólo becas, para apaciguar los gritos de millones de personas, pero no hacen impacto significativo.
Morena es un partido hecho al vapor por la fuerza de su lidercillo, mediocre personaje que creyó que sería el rayito de luz que cambiaría al país, no ha tenido la altura suficiente para poder hacer bien al país, puros errores que superan a los anteriores día con día. El grave problema es que como muchos dicen: «No entienden que no entienden», creen que porque 30 millones de personas les permitieron llegar al poder pueden hacer los que les plazca y no es así.
Viendo los números fríos, de los 30 millones que tanto se jactan, en este momento no tienen ni la mitad y no la tienen por una sencilla razón, el voto duro de Morena es muy pequeño y los que hicieron la diferencia a la hora del voto, pueden cambiar en cualquier momento, la cantidad de arrepentidos es enorme. Este desgaste les sucede a todos no solamente a este partido, es un proceso en el cual se acaba el noviazgo y empieza la separación.
Morena en Michoacán está peor, nunca fueron, ni serán fuertes, este Estado es un centro de estudio de la política, donde todos los moldes siempre se han roto. Morena no ganó a nivel general nada en el Estado, si bien es cierto que se llevó varias ciudades importantes, el voto estuvo bien repartido, tan es así que no tienen mayoría en el congreso, ni en los municipios. Pero, con el paso del tiempo tampoco han ganado nada porque los militantes y no militantes, pero grillos de Morena no han sabido ganar preferencias.
Las proyecciones del próximo año están muy claras, si antes el partido tenía una aceptación del 40%, ahora no cuenta ni con el 20%, entonces se abre una posibilidad para que otros partidos o la alianza de ellos pueda derrotarlos. Todo dependerá de la tonterías que su pejedente siga cometiendo, las cuales no le han ayudado en nada al partido y la magnitud de la caída económica que tendrá el país con el paso de la crisis sanitaria, porque debe de recordar, el voto siempre es influenciado por una sola cosa y es la cantidad de dinero que tiene uno en el bolsillo del pantalón.
Para la mayoría de la población, que el tontín de palacio siga cometiendo tonterías para que su partido siga cayendo día con día.