El día de ayer salió el Director del Catastro Estatal, Francisco Pérez, a decir, que busca incrementar en 42% el impuesto predial que le corresponde a los municipios cobrar, según el, para evitar que debido a la baja recaudación se vea afectado el Fondo Municipal.
El catastro es el inventario analítico y registro de los bienes inmuebles ubicados en el territorio del Estado de Michoacán y que tiene como objeto el registro de los datos que permiten conocer las características cuantitativas y cualitativas de los bienes inmuebles, mediante la formación y conservación de los padrones catastrales con la aplicación multifinalitaria. En base a este registro se cobra el impuesto predial, este se basa en el tamaño, localización y la inversión en el bien inmueble.
Dos cosas nos parecen una burla para los mortales que pagamos impuestos, primero, el incremento gigantesco a este impuesto en todo el Estado será un duro golpe anual a la economía del habitante michoacano que ya de por sí, esta en los niveles más bajos del país.
Segundo, si lee usted el primer párrafo, dice, el tal director que quiere evitar la baja recaudación. Esta recaudación no depende del habitante formal, ni del serio, depende de la tesorería de cada municipio y debo aclararle, que ningún, pero, ningún municipio, hace bien su trabajo en esta entidad.
Los municipios son comodinos y no quieren alterar a la ciudadanía, porque les afectaría en la próxima votación, pero para acabarla, no saben cobrar, en otras palabras no les interesa aún y cuando si un municipio cobra más recibe más participaciones federales, pero nunca lo hacen.
Para tener que cobrar mejor, tienen que invertir, capacitar y contratar y nadie, pero nadie, quiere hacerlo, porque es complicado y les afecta con broncas, personal y sobre todo más trabajo.
Entonces, porque la población tiene que pagar los platos rotos del mal trabajo que hace un gobierno, no claro, que no, los funcionarios obviamente buscan la salida más fácil, ineptos es lo que son. Pónganse a trabajar y si le rascan tantito, yo creo que cada municipio incrementaría un 30% el cobro de su impuesto predial y con eso sus participaciones se incrementarían al menos un 15% anualmente.
Así que esta no es la solución, la solución es que los presidentes y tesoreros de cada municipio trabajen y no sólo cobren el sueldo y esperen las mordidas de los constructores que les dan por asignar obras. Además que el Gobierno estatal también haga su parte modernizando la tecnología de cobro y de reconocimiento de bienes inmuebles para cobrar lo justo y no lo mínimo que siempre han cobrado.
!Vaya salida fácil de este funcionario¡
