Para rescatar la riqueza de las cuatro lenguas naturales (otomí, mazahua, náhuatl y purépecha) que se hablan en Michoacán, la Secretaría de Educación a través de la Dirección General de Educación Indígena, trabaja en tres vertientes que incluyen el rescate, fomento y enseñanza de las lenguas con la finalidad de que no se pierda la riqueza cultural de la entidad.
En Michoacán se ofrece atención educativa a cerca de un millón de estudiantes de nivel básico, de los cuales la Dirección General de Educación Indígena, a cargo del profesor Ramón Rosas Rangel, atiende a un aproximado de 52 mil estudiantes a través de esta modalidad de escuelas indígenas, con más de 3 mil 200 profesores en educación inicial, preescolar y primaria.
También se cuenta con dos secundarias indígenas ubicadas en Santa Fe de la Laguna y su extensión en la Isla de Janitzio, con un promedio de 200 alumnos pero que administrativamente, su atención corresponde al nivel de Secundarias Técnicas.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI), Michoacán es una de las 12 entidades del país que cuenta con más de 100 mil hablantes de lengua indígena, lo que representa 3.6 por ciento de la población total del estado.
Los municipios donde se ubican las lenguas otomí y mazahua están al Oriente del territorio michoacano; en la región Costa (Aquila) se encuentran los náhuatl y los purépechas por región del lago de Pátzcuaro, Zacapu, la Cañada de los Once Pueblos, Los Reyes, los que representan un 60 por ciento de la población indígena del estado.
El director general de Educación Indígena, precisó que la atención educativa de esta modalidad implica estrategias pedagógicas adecuadas y con el conocimiento y dominio de la lengua, acorde a la región donde se trabaje, porque la modalidad indígena requiere características diferentes a las primarias y preescolares denominadas generales.
En este sentido, se trabaja con tres vertientes, las cuales son la atención a las comunidades donde los estudiantes hablan la lengua; en las zonas donde únicamente los adultos la comunican, pero los niños aunque la entienden no la hablan y la tercera en las zonas que prácticamente ya no se habla y únicamente quedaron los usos y costumbres de su cultura, como es el caso de las lenguas otomí y mazahua (Oriente del estado).
Preocupados por este rescate, una estrategia que se implementará es que los egresados de la Normal Indígena de Michoacán sean ubicados en los lugares donde se habla la lengua que dominan, porque se han presentado casos de docentes que solicitaron cambios de adscripción en regiones donde no la practican.
Por lo anterior, el director general explicó que se promoverá que los cambios voluntarios y solicitados por el trabajador se permitan siempre y cuando sean acorde a la región de la lengua que habla, con la finalidad de que en su ejercicio académico no se pierda la enseñanza de la lengua natural.
Otra de los trabajos es la creación de Centros de Rescate de la Lengua, los cuales están ubicados en San Ángel Zurumucapio, Caltzontzin, Uruapan, Cherán, pertenecientes al idioma purépecha; además, se pretende la creación de otro centro en la región Otomí, específicamente en Zitácuaro.
Además, el 22 y 23 de noviembre, personal de la Dirección General de Educación Indígena de la Secretaría de Educación Pública, arribará a Pátzcuaro para ofrecer talleres sobre el uso metodológico de los textos que se entregaron a alumnos de primero a cuarto grado de primaria, los cuales están editados en las lenguas náhuatl, mazahua, otomí y purépecha.
Las sesiones de trabajo iniciarán primeramente con la lengua purépecha y posteriormente se agendarán y citarán a los maestros que hablen otomí, mazahua y náhuatl.