Salió el personaje que todos creíamos era el más fuerte del gabinete presidencial, Luis Videgaray, la mente financiera del país, tuvo que renunciar a su puesto, no lo corrieron, el tomó la firme decisión, para ayudar a su jefe y con su salida, llega alguien que ya estuvo y que lo convierte en el nuevo poder, José Antonio Meade.
El caos que puede causar una decisión mal tomada. Hace unos días se tomó la decisión de invitar a los candidatos presidenciables de los Estados Unidos a nuestra nación y el que inteligentemente la acepto de «volada» fue Donald Trump, causando un tremendo problema para la política nacional, millones de críticas le llovieron al país y sobre todo a su presidente, Enrique Peña Nieto.
La propuesta de la visita fue totalmente de Luis Videgaray, al parecer por temas económicos para nuestro territorio, la canciller Claudia Ruiz se negó totalmente y fue a aclararle a Hillary Clinton las razones. El «Trompetas» vino y fue un éxito para su campaña y un problema la imagen de nuestro Presidente, por eso, Luis Videgaray reconociendo la situación, se le presentó a su jefe y le entregó la renuncia y Don Enrique no pudo rechazarla.
El número 2 o 3 del país se fue y se fue con pantalones, tratando de proteger a su líder. La situación económica del país no importo, la política si. Esto sólo pasa en los países donde no se piensa con la cabeza, sino con el corazón. Yo si fuera el Presidente protegía el puesto con inteligencia, no por imagen, aquí en México, todo es política. Videgaray sin duda es una de las mentes más brillantes del país y llevaba la economía de una manera exitosa, pero vio su futuro político, quizo meterse donde no debía y se acabó. El debería seguir en su puesto llevando las riendas de los dineros, además, toda su gente cercana se fue, porque saben que yo están protegidos, causando desestabilidad.
El Presidente ya se va, debería de acomodar las piezas para que el país prospere y no se tambalee como puede suceder, aunque el que llega, José Antonio Meade, ya estuvo el puesto, no creo que conozca la ruta que había marcado su antecesor.
Esto que sucedió es un mensaje de aprendizaje para el Independiente, una lección de política, que le demuestra que primero está la imagen del presidente que las decisiones pendejas de un semisecretario que se siente semipresidente. Nunca entenderemos como un Presidente protege a aquel que toma pésimas decisiones. Este personaje allegado al Independiente no ha cesado de cometer errores en el poco tiempo de la administración y sigue ahí, primero debería estar el municipio, luego el elegido y por último el semisecretario, esto es básico, es la cadena alimenticia de la política, entonces te pregunto Alfonso, ¿Porque mantienes a alguien inepto que toma decisiones equivocas en el puesto?.