Suena a que el Presidente independiente Alfonso Martínez apoya a la economía moreliana, decidiendo que no habrá aumento de la tarifa del consumo del agua para el próximo año del 2017, pero la verdadera razón que el Congreso no lo dejó.
Igual pasó el año pasado y a principios de este año, con sus anuncios ridículos en el que decidía no aumentar la tarifa, para apoyar a los habitantes, cuando la verdadera razón es que nunca cumplió con los plazos establecidos por el Congreso para pedir el aumento del agua. Diferentes tiempos, misma situación.
Al terminar el mes pasado el cabildo a través de Presidente decidió en sesión no aumentar la tarifa del agua para este año que sigue, pero debajo de esta «humilde» decisión, es que nunca tuvo tiempo, ni pudo porque, el Congreso no se lo iba a autorizar. El Congreso aviso desde el pasado mes de abril que el tiempo correcto para que todos los municipios del Estado que necesitarán incrementar la tarifa del agua deberían solicitarlo antes de que terminara el mes de Agosto y como el Presidente sabía que el Congreso no se lo iba a permitir, decidió anunciar que no habría incremento, sin hacer el intento, haciéndose pasar por el bueno, porque nunca le permitieron ser el malo.
La comisión de Hacienda y Deuda Pública en esta Legislatura, la controla el PAN, este acérrimo enemigo del Alfonsito, esta, no le permitirá nunca que haya cualquier incremento o deuda adicional para su administración, por eso mejor, ni el esfuerzo hace.
El OOAPAS es un problema gigantesco para el municipio, esa dependencia está muy endeudada y su sindicato es uno de los mayores problemas de país, si escribí del país, porque no han podido controlarlo por años, sangra las arcas del ayuntamiento a un grado excesivo y técnicamente necesita el incremento año con año, pero la actual administración inepta no ha podido, ni podrá solucionar este problema, ni el de su tarifa.
Así que no se crea que el municipio decidió no incrementar la tarifa porque es buena onda, sino porque simplemente no puede, no lo dejan, no puede políticamente, ni administrativamente.