La noticia del día de hoy fue que el señor gobernador de nuestra entidad, pidiera recursos al Ejecutivo Federal para las Zonas Económicas Especiales (ZEE) y así pudieran conformarse los proyectos básicos de inversión para dichas regiones. Estos recursos los pide el gober para meterlos en la licuadora financiera de la entidad para después asignarlos a cualquier otro proyecto, en otras palabras para chingarselos.
Lo correcto es que si son zonas federales y el gobierno federal conoce nuestra situación, no debería de ninguna forma enviar esos recursos, sino el mismo administrarlos a tráves de algunas delegaciones, en sí el conjunto de economía y comunicaciones y transportes, pero ese dinero no debería entrar en las arcas del Estado porque peligra.
Así es como se hacen las cosas, si quieren revolver las finanzas o salir del hoyo en que ellos mismos están metidos, como siempre, se le pide la lana a la federación para ciertos proyectos y luego se gasta en otros, bien dice el dicho: «Más vale pedir perdón que pedir permiso».
Nuestro Estado está sufriendo en todos los aspectos, pero en el sector de las finanzas, está agonizado. Pero la culpa la tenemos los michoacanos que seguimos votando por personajes que solamente saben robar y hacerse ricos, el mejor ejemplo, es la cantidad de exgobernadores que se encuentran en presos o en proceso judicial. En Michoacán, déjeme le cuento que el principal exgoberndor que fue el que empezó con este verdadero desmadre fue el exgobernadorsito Lázaro Cárdenas, el fué, el que no supervisó y dejó que rateros como Humberto Suárez o Eloy Vargas se hicieran millonarios a nuestras espaldas y claro una vez hecha la bola de nieve y de bajada, valió madre y pasando el tiempo, pues la bancarota.
Cada vez que entra algún dinero en las finanzas del Estado, desaparece o se utiliza en otras cosas, ¿porque?, porque no tenemos el suficiente y tenemos que pagarle a los huevones maestros, normalistas, sindicalizados o a los de la Universidad y para el resto de los mortales que pagamos impuestos, pura madre.
Por eso el dinero se debe manejar desde la federación, o a través de las delegaciones, no a través de las arcas del Estado.