Empezar hablando de Kim Kardashian no es un buen comienzo. Si hay que hablar de Kardashian siempre será más cómodo abordar su historia como un fenómeno mercantil: Frases del tipo: Kim Kardashian ingresó 28 millones de dólares el año pasado sin, aparentemente, trabajar en nada concreto. ¿De dónde llegan sus ingresos? Kardashian recibe dinero por sus pende… en televisión, por asistir a eventos, por las ventas de ropa y cosméticos y, en un proporción aún pequeña pero al alza, venta de publicidad (más bien encubierta) en redes sociales. Cuando Kim deja caer en su instagram que qué estupendo su nuevo pintalabios, está haciendo negocios. También SERÍA sencillo jugar a científico social: ¿qué dice Kim Kardashian de nuestro mundo líquido y posmoderno? ¿De la sexualidad, de la relación con nuestros cuerpos, del feminismo? El otro día, alguien escribía que Kim Kardashian era una heroína feminista de nuestro tiempo.