MSV.- Si de donde han salido la mayoría de los obispos que ha tenido nuestro país, que es el Seminario Mayor de Morelia, quiere decir que estamos en problemas, porque según nuestro arzobispo, fue por inseguridad. En otras palabras como se dicen en La Extra, Segunda Edición de Diario de Morelia, ¡ya calienta!
Hay muchas incidencias de esta naturaleza, pero no donde se asientan los poderes gubernamentales y delegaciones Federales.
En Apatzingán ya hace tiempo que su seminario fue cancelado y sus seminaristas, como los treinta de Morelia, fueron trasladados a Zamora, donde parece ser, que como hay más trabajo que empleos, los que habitan esa ciudad, no carecen de recursos para sostener su existencia. Y mire que ahí sus autoridades religiosas han tenido problemas que han trastocado la paz interna de sus dirigentes.
Desde luego que la cantidad de seminaristas han mermado la enorme carencia de sacerdotes que padece Michoacán, porque antes éramos el 86 por ciento de católicos, ahora esta cosa es diferente -según se dice de ello-, por la pederastia y pedofolia que no mina, si las violaciones a menores, que son consentidas como muestra de obediencia, porque sabrán que por ejemplo el que se alcanzó a promover como beato en vida, Marcial Maciel, fue separado de la Iglesia por Juan Pablo II y que por cierto éste beato y pronto santo, a su tumba se llevó la pena de haberle firmado un documento que por indicaciones médicas, se le dispensaba algunas de sus necesidades fisiológicas al cotijense, que como humano, todos los hombres tienen y que por cierto, en el libro que ya casi empieza a circular sobre se termina con el celibato, o se acaba la religión, se aclara lo célibe del sacerdocio, que Benedicto décimo sexto, reconoce como una disciplina, nuestro nuevo Papa Fransisco I como una decisión personal, no de sacramento y Cristo aludió como un voluntariado para dedicarse de lleno al servicio de Dios y de su reino. Por cierto que lo anterior lo trata como una verdad no fácil de comprenderse, por eso mismo Cristo, precisó que no todos entienden este lenguaje, sino sólo aquellos que tal gracia se les ha concedido.
Tal virtud, la comprende, solamente aquel que puede comprenderla, por eso es que terminar con el celibato es imposible, en este mundo tan descompuesto y con tantas religiones que tienen no solamente padres hombres y mujeres que llegan al grado de obispo, que se les permite casarse, aunque por una sola vez, sin registrarse entre ellos pederastia ni pedofolia alguna.
Lamentable pues que por falta de seguridad se haya cerrado el Seminario Mayor de Morelia, donde tantos morelianos y michoacanos en general, han pasado por sus aulas y la menor cantidad ha conseguido tener la gracia de ser sacerdote para estar al servicio de la Iglesia Católica que es el reino de Dios.
