Mientras no haya respeto a las instituciones y a la sociedad michoacana habrá confrontación, inestabilidad, desencuentro e injusticia, advirtió el gobernador del estado de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, por lo que insistió en la necesidad de regresar a la legalidad y al respeto del imperio de la ley.
Durante una gira de trabajo realizada por comunidades de ese municipio, recién escenario de violentas manifestaciones de grupos delictivos, el titular del Ejecutivo estatal señaló que el crecimiento de las figuras delictivas se debió, en gran medida, a la ausencia y abandono de las autoridades.
Dijo que los grupos criminales de facto tomaron el control y se apoderaron de muchas zonas de la entidad, mediante la entrega de dádivas, apoyos y cumpliendo las funciones que corresponden a la autoridad.
Sin embargo, explicó que dicho proceso, a la larga, tuvo un efecto alto y dañino para las comunidades, cuyos jóvenes se han visto enviciados por las drogas que elabora el crimen organizado y venden a este sector, además de ser usados para delinquir a favor de estas células.
En tal sentido, el mandatario aseguró que no habrá espacio ni comunidad donde el gobierno no tenga presencia, y se intensificarán los trabajos para la recuperación del tejido social y la confianza en las instituciones.
