MSV.- No es que se sorprenda uno, pero este caso de Lupita Santacruz está como el de Rosario Robles, que en lugar de que el Presidente Peña Nieto la dejara a que se la comieran los lobos que ya le aullaban, con decirle eso de nos “están queriendo molestar”, fue suficiente para que los partidos, principalmente el de Acción Nacional demostrara que su gente que todavía mayoriteaba la infraestructura en oportunidades, fuera dirigenciada por gente que pensara como indican los proyectos de servicio que un partido tiene en el gobierno que logra llevar al poder; así Lupita, al ser nombrada en Comunicación Social, simila a los reconocimientos de servicios que aparte de simpatía, conllevan pasión por dar los resultados que le indican.
La prensa es para el gobernador, su factor base de hacer buenos gobiernos. Tiene en los periodistas su mayor desarrollo político, pensando que periodista que no escribe, sí habla y si conoce de la lid, hacerlo y como entrevera de todo lo que recoge, que le pone más aliento que lo que a veces calienta cualquier frase escrita o hablada. Y más ahora que sabe realmente que los periódicos ya no los compran, yendo a comprobar tiros de escritos y reales que oyen o ven en tanta competencia, por la hora en que lo hacen o como en portales de la internet, de cuantos de ahí se enteran, que francamente, sólo a la Galindo, que era del medio, que sus contactos eran como los dueños de casinos: no hablar de posibilidades, sino del hoy: ¡qué resultado!
Además, toda la información está donde hay saturación, no donde nada se sabe de quién y cómo se gobierna. Esos lugares donde está la energía viva y sobrada, que es el lejano pueblo que tiene otro mundo.
Ella, de apodo “confianzas”, quien la ha tratado o la va a tratar, va a estar como un medio de información de estado, de donde viene, que le entendió a que los difusores directos de gobierno, solamente sirven para hacer política; claro, con el resto de espacios cubiertos por inquietudes que al ponerse en acción, promueven propias simpatías, porque creer que se cubre o que sirve donde todos quieren ese reconocimiento, es personal fantasía.
Contactos y relaciones, usar a conveniencia lo que en el momento sirve, es lo útil, porque gobiernos van y gobiernos vienen y los pueblos solamente vibran por el trato y el modo en que el no a la petición no lastime y el sí, no maree. Son feas las comparaciones, pero un Margarito Antúnez Domínguez, un Norberto Vega, un Fausto Vallejo, tienen ese ángel de saber apapachar o que sus colaboradores le emulen por sus indicaciones, tal como de la que estamos tratando hoy, que llega más a comunicación por la pasión y cooperación que todos le hemos visto a gente en especial como la que hoy con fama se le dice la jefa Maru y que con la Jefa Lupi, a lo mejor como en las informaciones que tienen que llenar espacios, deja de llevar basura y pone en práctica eso de menos promesas y más cumplimientos.
