Ahora que el próximo miércoles que venga Pepe Meade, se darán a conocer los posibles candidatos a la senaduría por el PRI. Los posibles jugadores son Alfredo Anaya Junior, Juan Ixtláhuac, Xóchitl Ruiz y Ana Brasilia de los cuales parecería ser que no se hace uno, lo que al parecer están privilegiando es la lana y los acuerdos.
Pero, donde quedan Víctor Silva, Adriana Hernández y Daniela de los Santos, pues déjeme decirle que es negociación pura y vamos por partes. Víctor Silva se debe de quedar como Presidente del CDE del PRI, ya que, si se va como candidato, las cosas se caen, primero se complican los acuerdos, segundo podría llegar una aliado puro de Fausto Vallejo y entonces los fautistas tomarían el poder y sería fatal para la elección y tercero podría quedar en manos después de derrocar al gran amigo de Fausto, llegaría Mario Armando como propuesta del Chon Orihuela. en otras palabras un verdadero desmadre preelectoral que no necesita el partido. Esta división causaría la perdida total del rojiverde en estas elecciones y por lo tanto una perdida total de votos para Meade.
Adriana Hernández la van a sacar totalmente de la jugada, primero porque los chuchos ya no tienen el poder para mantenerla en el puesto que estaba, ella misma no cumplió ningún acuerdo para ayudar a personas, amigos, patrocinadores del partido en el Congreso y mucha gente ha exigido su salida total, su apuesta, será la de ser Presidenta Municipal de La Piedad. La otra mujer de la cual se rumora la comentaremos en otro artículo.
Por lo tanto, el PRI la tiene muy difícil para que no se rompa, ya que como saben todos son viejos lobos de mar y todos son vacas sagradas y todos creen que se merecen o se las deben, bonita situación para el partido en estas elecciones.
Solución, Silva sigue de Presidente, controla las huestes, define candidatos y arma estructura, para que para ser candidato en las siguientes elecciones y entonces nadie se puede salir del redil porque podría ser perjudicial.
