Cuentan los tecolotes monasteriales del CPC Revolución que apañaron a los dos presuntos asesinos de un joven que el pasado lunes fue hallado muerto y semienterrado, en un lote baldío de la colonia La Aldea, de esta ciudad, primero jallaron a los familiares de la víctima, quienes identificaron a su pariente como José Manuel Medina Rubio, alias “El Quelele”, de 25 años.
Quien presentó múltiples lesiones en todo el cuerpo, los monasteriales investigaron y revolvieron las vidas de los vecinos hasta que llegaron hasta Ernesto Alvarado Pintor, “El Rute”, de 25 años y Osvaldo Jiménez Jiménez, “El Valdo”, de 22, vecinos de la colonia La Aldea, de esta capital, el rule y el valdo confesaron su crimen: Alvarado Pintor declaró que él le tenía coraje al quelele.
Porque éste había denunciado a su hermano Joaquín Alvarado Pintor, “El Pecas”, por el delito de violación, por lo cual se encontraba preso en el penal de Mil Cumbres, Ernesto Alvarado planeó darle muerte a Medina Rubio y se puso de acuerdo con Osvaldo Jiménez, ya que éste tenía viejas rencillas con él y pos lo demás ya es historia los batos ya están entambados.