Como “mejoralitos” y “sobaditas de espalda” calificó el presidente municipal de Tuxpan, Carlos Paredes Correa, los 100 millones de pesos que liberará el gobierno del Estado para los ayuntamientos michoacanos.
El ex coordinador de los presidentes municipales del Partido de la Revolución Democrática (PRD), explicó que a cada ayuntamiento le entregarán alrededor de un millón de pesos, situación que afirmó no vendrá a resolver ningún tipo de problema financiero, debido a que son “medidas paliativas”.
“Eso no soluciona y no resuelve pareciera que solamente se nos dan pago para que no sigamos presionando, porque no resuelve la problemática con mejoralitos nada más, cuando el Estado sabe perfectamente de los adeudos con los municipios y hay una particularidad con los de izquierda quienes fuimos quienes gestionamos más”, indicó.
El también vicepresidente de la Conferencia Nacional de Municipios de México (Conamm) detalló que a mediados de la semana pasada, los ediles emanados del sol azteca, sostuvieron una reunión con el diputado federal, Silvano Aureoles Conejo y servidores públicos de la Secretaría de Finanzas, para crear un calendario de pagos que rechazó vendrá a resolver la problemática económica de los municipios.
Y es que explicó los 100 millones de pesos se repartirán entre los ayuntamientos emanados de las tres principales fuerzas políticas, lo que corresponderá a alrededor de 33 millones de pesos por partido y advirtió que tan solo del aurinegro existen 32 alcaldías y de estos a Tuxpan adeudan poco más de 34 millones de pesos.
Confió en que el presidente de la Mesa Directiva de la cámara baja, asigne recursos extraordinarios para los ayuntamientos michoacanos, sin embargo, advirtió que esto representará una “tentación” para el gobierno del Estado y el presupuesto podría “desaparecer” antes de arribar a las arcas públicas municipales.
Paredes Correa añadió que la intención de los 32 presidentes municipales perredistas de realizar huelga de hambre o interponer un recurso legal contra el gobierno del Estado como medidas de presión para liberar los recursos, -no está descartado, ni en el olvido-, pero se mantendrán a la expectativa para otorgar un plazo y puedan ponerse al corriente de los pagos.