El gobernador electo del estado de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, recibirá una entidad endeudada a largo plazo que ronda un monto total de 17 mil 500 millones de pesos, pero su preocupación es la deuda contingente que ronda los 14 mil millones de pesos y el boquete financiero debido a la dificultad de manejarlo por los ingresos alrededor de cinco mil millones de pesos. Aunque con datos imprecisos,
Aureoles Conejo afirmó que entre las partes más sensibles que se encuentra identificando antes de estar al frente del gobierno de Michoacán, son los déficits por cuestión de los gastos educativos.
“De entrada traemos arrastrando un déficit importante que rebasa los cuatro mil millones de pesos y más lo que se genera cada año por la demanda de los egresados de las normales que requieren ser considerados en la plazas, y otras necesidades de inversión para generar crecimiento y empleo”, señaló el ex presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, tras la reunión privada que sostuvo con legisladores del Partido Verde.