Después de una corretiza por las azoteas los pepenaron y ahora están listos pa’ regresar al tambo.
Un par de dos juntos y cogiditos de la mano, fueron reaprehendidos por los elementos policiacos después de que los mismos se habían metido a robar a un chante de esta ciudad, los malandrines en esas estaban cuando los vecinos chismosos los vieron trepados en la azotea de un chante que se ubica en la avenida Acueducto, por lo que en chinga le chismearon a la tira quienes prestos llegaron al lugar del robo y les pidieron amablemente a los ladrones que bajaran de la azotea, pero los malandrines en vez de hacerles caso a los tecolotes, emprendieron la huida brincando las azoteas.
Los chismes recabados en el lugar del robo dicen que la mañana de este jueves, dos sujetos fueron apañados después repito de una peliculesca persecución por las alturas, los ahora apañados se habían metido a robar a una casa-habitación en la Avenida Acueducto de la capital michoacana, C-4 fue el chismoso que les paso el dato a los tecolotes supuestamente de una llamada anónima que alertaba de la presencia de dos sujetos en la azotea de un chante popof y como allá sí hay remuneración económica pa’ los tirantes pues en chinga se apersonaron en el lugar.
Al ver a los tirantes, los delincuentes intentaron darse a la fuga brincando varias casas por lo que de inmediato se montó un operativo para detenerlos, que duró unos minutos porque después fueron apañados quienes dijeron llamarse Miguel Ángel Carapia Ramírez, de 31 años, con domicilio en la calle Ocolusén No.
1400 de la Colonia Jardines de Rincón, así como Alejandro Ramírez Díaz, de 34 años, con domicilio en la calle Anisidio No.
33 de la Colonia Mil Cumbres, después de revisar sus antecedentes personales, estas dos personas tenías aproximadamente seis meses de haber salido del Cereso Mil Cumbres.
