Comadre, estamos cerca de que la gente que ya toma medicamentos solamente para tener calidad de vida, pero que no tiene curación, empiecen a morir, porque espantadas de que no solamente las instituciones de salud se las detienen, sino que ya no se las dan, viéndose obligadas a surtir la receta en farmacias públicas –que es mejor calidad-, no lo hacen porque no tienen dinero.
Eso es cierto comadre, yo lo estoy padeciendo.
Tú, que te vas a Veracruz por tus tres celulares Ipods que va a regalar ese diputado panista que quiere ser gobernador, tú crees que allá te la va a surtir el ISSSTE y si dicen que tanto la pastilla del corazón, como para la depresión y la de la dormida, te van a pelar el monedero, porque te llevas casi los dos mil pesos y las recetas…
¡Uhhh! comadre, llevo muchas retrasadas, por eso no hay problema.
Bueno, pues a haber cómo te va. Te aseguro que vas a regresar llorando, peor de lo que lagrimeas cuando vas a ver si ya te surten tus medicamentos y te dicen que tal vez para el otro mes.
Pues mira comadre, para vivir un poco más, vamos a tener que comer zacate del dulce, de ese chaparrito de los cerros, porque ya están diciendo que los animales que lo comen, producen buena carne y nunca mueren de nervios o falta de dormir y hasta del corazón, que su circulación de sangre siempre es buena.
Ya lo había pensado o entrarle de plano a los nopales fritos en su propio jugo y ni frijoles porque el kilo ya no baja de los treinta pesos y siempre va a subir, nunca regresar cuando menos a 12 pesos el kilo como costó en mucho tiempo.
Eso si, nunca que sube un producto baja y más si tiene demanda y no hay producción suficiente.
Bueno comadre, por lo pronto, hay que decirles a todas nuestras conocidas, que se pongan a recoger firmas, porque las autoridades no creen que sea cierto que nuestras medicinas nos las están escamoteando.
