Los integrantes de los partidos bonsai los cinco diputados al Congreso de Michoacán, que conforman la conocida chiquillada parlamentaria, entre los que se encuentran los contras profugos de su coordinador, presentaron una iniciativa de punto de acuerdo para que la 72 Legislatura pueda auditar cuál es el verdadero estado de salud del gobernador con licencia, Fausto Vallejo Figueroa.
El perredista Uriel López Paredes, líder de la bancada emergente, dio a conocer en rueda de prensa que la propuesta debe ser aprobada en virtud de que es un derecho constitucional de los michoacanos el estar bien informados sobre los asuntos del quehacer público.
En tal sentido, la exposición de motivos de la iniciativa plantea la conformación de un grupo multidisciplinario –en el que converjan médicos, juristas, legisladores y otros tantos expertos en temas específicos—a fin de que “pueda dar claridad y certeza sobre el estado real de salud” del cuatro veces ex alcalde de Morelia.
El próximo 20 de julio vence la licencia por tres meses que concedió el Congreso de Michoacán a Fausto Vallejo para atender su salud, y en día recientes también los partidos de la Revolución Democrática y Acción Nacional han condicionado su aval a un nuevo permiso a la existencia de documentos confiables que revelen cómo se encuentra el ex dirigente estatal priísta.
De acuerdo con Jesús Reyna García, gobernador interino de Michoacán, Fausto Vallejo Figueroa, fue intervenido quirúrgicamente con éxito, de un trasplante de hígado, y se recupera satisfactoriamente en la ciudad de Chicago, Estados Unidos.