M. Sánchez Vargas. Como hasta ahora no se registra ningún apoyo especial de la Federación para el Ayuntamiento independiente de Alfonso, su hado, que debe tenerlo lo saca de sus broncas económicas, pero no le esperanza de ser el edil que consiga una posición superior y menos por ese modelo de hacer poder, si lo que se confirma es que haya todos los candidatos independientes que quieran, para que esas simpatías se desmoronen por la cantidad de aspirantes independientes y además porque la historia es que partido u organización que no hace nada, se opta por el que “chismeé diferente” y de plano se recurre al tradicional.
Aquí se nota con Alfonso que gestionar no sabe, que se le tiene que pegar al bronco de Nuevo León, que de alguna manera está en línea superior o recurrir a inversionistas, que sepan ejercer sus mañas, pero no tan descaradas y vaya que los hay.
Aunque de los demerecimientos que le comprobó su partido, siguen siendo bandera, tanto lo de mocharse con el que era líder de su partido Miguel Angel Chávez y la modesta fortaleza al estilo del Gral. Arturo Durazo en Acapulco, que se hizo en Tres Marías tan pronto como empezó a manejar dinero público.
Sean peras o sean manzanas, pero Alfonso debe salir a lo tradicional de lo que es la verdadera política que se ordena en la administración pública, ser un cínico más completo, con la habilidad suficientes de que sus contestaciones nunca den pergeño de un sí.
Desgraciadamente asi es, ni modo. O nomás dígame, quién al iniciarse dura siendo honesto, si algo de honestillo se tiene, es cuando ya se tiene y de lo que le sobra, puede.
