Los resultados de la visita del Papa a Michoacán no deben ser cuantificados porque no se puede medir el impacto positivo que generó el mensaje de paz y amor en la sociedad, comentó el secretario de gobierno, Adrián López Solís.
En entrevista, López Solís consideró que el evento cumplió con su tarea, la cual fue llegar a los corazones de los feligreses; asimismo, dijo, pudo mostrarse una imagen diferente de Michoacán en México y el mundo entero.
De igual forma, precisó que la falta de afluencia no fue una constante única de Morelia, pues hubo otros sitios que presentaron los mismos signos, como el zócalo de la ciudad de México, por eso creé que no fue falla del gobierno estatal.
Al respecto, indicó, no se trata de ver en qué falló la autoridad, sino qué hizo para crear las condiciones factibles con las que contó Michoacán durante el acontecimiento, así como el saldo blanco obtenido por los protocolos de seguridad.
Lo anterior, ayudará en la imagen del Estado y de la capital michoacana ante el mundo, lo cual traerá sin duda a turistas en temporadas altas y por ende mejoras en la economía local.
En cuanto al gasto realizado, informó, fueron 22 millones de pesos más 40 de difusión y logística, sin embargo, pidió paciencia porque la cuenta total están por hacerla pública.
