Reporte Índigo publica este jueves que los ex autodefensas de La Ruana, amenazan con regresar a sus orígenes como civiles armados, y señala que la amenaza de un abandono masivo es latente, pues la corporación acusa a las autoridades de abandono, ya que no han sido capaces de pagar su salario a por lo menos la mitad de los policías.
A continuación la publicación íntegra de Reporte Índigo:
Los 57 elementos de la policía de La Ruana, Michoacán se quejan de falta de pago. Los ex autodefensas -ahora en la legalidad- amagan con regresar a sus orígenes como civiles armados
La Fuerza Rural Estatal (FRE) en Michoacán podría desintegrarse y sus miembros regresar al origen de las autodefensas, cuyos grupos –a pesar de la postura oficial- no están desarticulados.
La institución cumbre del comisionado federal Alfredo Castillo se tambalea. La amenaza de un abandono masivo es latente.
Algunos de los integrantes de esta policía rural acusan de abandono oficial. Debido a la crisis económica que afronta, el gobierno de Salvador Jara no ha sido capaz de solventar el pago salarial de por al menos la mitad de los autodefensas, hoy convertidos en policías.
Incluso algunos de esos elementos -como los que integran el grupo de La Ruana- no cuentan con armamento, vehículos, ni municiones suficientes para afrontar al crimen organizado.
De acuerdo a la última cifra dada a conocer por Castillo, son 874 ex autodefensas que operan como policías de la Fuerza Rural Estatal, mientras que 694 aún siguen en capacitación.
La oferta que el Gobierno Federal hizo a quienes dejaron las autodefensas para sumarse a la policía rural fue un pago de 8 mil pesos mensuales, más un bono de mil pesos. La mayoría no han recibido su salario completo, según ha trascendido.
Esa es la queja de los 57 policías rurales que integran el grupo de la comunidad de La Ruana -que pertenecen al grupo que comanda Hipólito Mora- a cuya denuncia se han sumado algunos elementos de la policía de Tepalcatepec, quienes reclaman también la falta de equipamiento para afrontar al crimen organizado.
El comandante Estanislao Beltrán ha asegurado públicamente que es él quien tiene que pagar el consumo del combustible de algunas de las unidades que están en condiciones de circular por la zona a su cargo.
Ante la falta de pago, los integrantes de la Fuerza Rural Estatal de La Ruana amenazan con dejar la institucionalidad y retomar la playera blanca para asumir el control de la seguridad por su cuenta y riesgo.
Mantienen el control
La declaración del comisionado federal Alfredo Castillo de que los grupos de autodefensa han desaparecido en Michoacán se estrella frente a la movilización de medio millar de civiles armados en los municipios de Coalcomán y Aquila, en donde mantienen el control de caminos y carreteras estatales.
También en los municipios de Lázaro Cárdenas, Aguililla, Tepalcatepec y Chinicuila se reportaron retenes de personas portando la típica playera blanca de las autodefensas. En muchas de las barricadas hay mujeres y niños armados con palos.
La lucha que continúa
A través de la página de Facebook Valor por Michoacán, los que se reconocen como grupos auténticos de autodefensa, se declaran en movilización. Aseguran que se mantienen vigentes y solicitan públicamente que la autoridad en Michoacán reconozca su movimiento y planes de expansión para continuar el combate al crimen organizado.
En el mensaje que circula por la red, señalan que no han desaparecido, que la lucha continua “y no se terminará mientras el Estado de Derecho no sea restablecido en Michoacán”.
Acusan públicamente al comisionado Alfredo Castillo de dar la espalda al pueblo y respaldar a los miembros del crimen organizado.
“Esto es un llamado al gobierno para que tome en serio a los pueblos que contamos con autodefensas auténticas y no vendidas como las que impuso el comisionado Castillo”, dice el texto publicado en la página.
Valor por Michoacán se ha distinguido por ser el espacio de difusión a las acciones de los grupos de autodefensa que luchan contra el cártel de Los Caballeros Templarios.
También piden que se les permita continuar con la expansión en el territorio estatal, la que se detuvo tras la detención de José Manuel Mireles, de quien solicitan su inmediata liberación y el cumplimiento de los acuerdos pactados antes de la creación de la Fuerza Rural Estatal.