Si las condiciones se dan, el Gobierno de Michoacán solicitará a la federación, se declaren algunas regiones de la entidad como zonas de desastre, principalmente para la reparación de los sistemas de agua potable, de las calles que han sido afectadas y demás infraestructura dañadas, debido a las torrenciales lluvias de los últimos días, anunció, Jesús Reyna García.
“Vamos a ver si de acuerdo a las condiciones que se dan, podemos solicitarlo y a ver si logramos para que en este caso, resultado de estas lluvias y esta precipitación que fue muy grande durante todos estos tres días aquí en Lázaro Cárdenas, logramos que el Gobierno Federal lo declare zona de desastre”, dijo.
Por lo pronto -señaló el mandatario michoacano-, este miércoles arribarán los funcionarios estatales para hacer un trabajo de campo y cuantificar la magnitud real de daños, así como para que se aseguren que los apoyos lleguen a quiénes tienen que llegar.
En su recorrido por el Puerto de Lázaro Cárdenas, Reyna García, aseguró, que ningún michoacano se quedará sin la atención de los gobiernos federal, estatal y municipales, ya que son la prioridad en este momento.
“Les quiero decir, que estamos con ellos, que las instituciones, el Gobierno Federal, el estatal, los gobiernos municipales están muy atentos y muy al pendiente de lo que está sucediendo, que estamos haciendo el mayor de los esfuerzos para atenderlos con prontitud y que no les falte nada. Estamos dedicados las 24 horas a esto.”, expresó.
Al respecto, el jefe del Poder Ejecutivo en la entidad, reiteró, que no tienen en este momento, ninguna otra prioridad que no sean todas aquellas personas, michoacanos sobre todo, que han resultado afectados con este fenómeno que es la Tormenta “Manuel”.
En el caso de posibles riesgos por desbordamientos de las presas de las regiones de Tierra Caliente y Costa, Jesús Reyna, aseguró, que todo esto es una cadena de presas que se conocen como el “Alto Balsas” y que llegan hasta el municipio de Lázaro Cárdenas.
Explicó, que de acuerdo a la información que se tiene, las presas más altas que son “El Caracol” y “El Gallo”, ya están controladas en sus demasías que vierten sobre el Río Balsas y eso, agregó, permitirá que “Infiernillo” soporte la carga de agua que recibe, que no vierta además hacia “La Villita” y que ésta a su vez controle su salida de agua.
“Se va a mantener por lo menos en el nivel en el que está el desfogue de “La Villita para que tenga capacidad y le permita soportar cualquier avenida posterior e imprevista y que no la pueda soportar y que entonces, aquí en dónde estamos parados estemos hasta las rodillas de agua”, agregó al final el mandatario michoacano.