CON LLAMAS DE 20 METROS DE ALTURA Y NO DEJAN PASAR A BOMBEROS:
en tanto los habitantes de la colonia Industrial empezaban a dejar sus casas, los bomberos permanecían fuera de la empresa Quimic S.A. de C. V., sin dejarlos entrar disque por la misma seguridad de la empresa, como si fueran a saquearlos.
Esta clase de incidentes que peores han sucedido en Santa María de los Urdiales 175 que está cerca de la Harinera Michoacana y también de la empresa AAK, antes Aceitera Santa Lucía, juntito también de la estación de la CFE que está en Av. Guadalupe Victoria, son ya varios casos de explosión, pocos de ellos reportan muertos porque son vecinos del lugar, por lo cual casi no tienen obreros que pueden hacer mitote vecindario.
El mismo hecho de que nieguen la entrada a los bomberos y Protección Civil, hizo pensar como en otras ocasiones que primero arreglaban su “mortandad” y luego ya se daba a conocer lo único que convenía, ocultando lo que les podía ocasionar su clausura. Aunque ya en el Congreso hace varios años se firmó un acuerdo cuando estaba por cierto Esperanza Morelos del PAN, que esa empresa se cambiaba de lugar en tres años y nomás construyeron otra donde se les proporcionó terrero y todo se acalló de acuerdo a la frase de los “cañonazos de “Alvaro Obregón”.
MAS DE 500 “VAROS” LE RECOGÍA SU MADRE EN LIMOSNAS:
de no ser porque los propios vecinos le pusieron el dedo, un bato llamado Juan Carlos de la ahora Ciudad de México, hubiera siguiendo explotando a su mamá de 81 años que ponía a pedir caridad en una de las estaciones del metro de la Delegación Miguel Hidalgo, donde alcanzaba a recolectarle de limosnas de quinientos a setecientos pesos durante once horas de andar paradita, hablando y con la mano –cualquier de las dos-, completando su imploración de que le dieran una caridad por el amor de Dios.
