Bien dice el dicho: «El Diablo sabe más por viejo que por Diablo», la experiencia de Cristóbal es una de las más poderosas en nuestro Estado. El haber sido ya, senador y diputado, y además según él candidato ganador de las elecciones a gobernador en el 92, donde supuestamente hubo fraude y ganó Eduardo Villaseñor, donde hizo que el pueblo tomara durante meses la avenida Madero en protesta por la elección, haber sido candidato perdedor en las elecciones de 1995 ante Víctor Tinoco Rubí, haber sido también Secretario de Gobierno durante el periodo de Cuauhtémoc Cárdenas. Todo esto hace que la sabiduría política de este personaje hace que sepa como moverse y en los últimos días está la respuesta.
El haberse sentado al lado del Presidente electo Andrés Manuel López en la reunión de senadores electos, crea la percepción de que es alguien poderoso y amigo íntimo del próximo mandatario, pero no es así, el sabe moverse en el océano político de la izquierda. El no es tan allegado al peje como todo mundo cree, pero AMLO, sabía de su experiencia y lo atrajo. Pero debido, a todo el mitote que se está haciendo por ese momento, lo hace sentirse ya todopoderoso.
Habrá que ver si tiene las pilas con las que contaba antes, las estructuras, los movimientos de gente y sobretodo las ganas, los años no pasan en balde y obviamente aunque luce cansado, de seguro el quiere volver hacer la intentona para ser gobernador, cosa que se la ha frustrado dos veces.
De seguro Cristóbal no le habla al oído al peje, como le hablan Marti, Monreal, Polevnsky, su esposa u otros, pero el tiene que demostrar que es el bueno para el Estado dentro de 3 años. Su competencia, fácil, su único contrincante fuerte Raúl Morón, ya que Roberto Pantoja es un pobre diablo, venido a más que no está a estatura de Arias, pero mucho más abajo están, Alfredo Ramírez, Cristina Portillo, Blanca Piña, María Núñez, Fidel Calderón que le vendió al Próximo Presidente la idea de que era un chingón y Leonel Godoy que ya fue y no desea volver a serlo porque tendrá una posición mejor.
Pero el que haya tenido la suerte de estar al lado del mandatario electo en una simple reunión, no nos demuestra nada todavía, excepto de que es chingón para saber sentarse, así que falta mucho para saber y falta mucho por demostrar. El cachorro de Churumuco debe de ser menos soberbio y más activo, porque sinceramente creo que debe de demostrar su trabajo y luego sentirse gobernador.
