Cuando pensamos en prostitución siempre lo asociamos al hombre que paga por mantener relaciones con una mujer, pero ¿son solo los hombres?. Normalmente así es, pero ahora con la liberación, empoderamiento y equidad de género, las mujeres son más atrevidas, aventadas, decisivas, poderosas, por eso ahora un número mayor de mujeres se atreven tener sexo sin lazos sentimentales, por esto y más, las mujeres también pagan a cambio de tener sexo.
En las últimas encuestas llevadas a cabo se arrojan datos claros. Las mujeres de hasta 35 años no contemplan la opción en su gran mayoría. Esto es debido, en buena parte, a que no tienen dificultades para acceder a hombres, sólo necesitan salir una noche de parranda para ello. A partir de los 40, aunque tienen el mismo acceso a los hombres, parece que la percepción cambia y esta idea ya no es tan irreal. Empieza a haber diversidad de opiniones entre las mujeres y hay quien asegura que no le importaría en absoluto y otras que, por consideraciones higiénicas y de privacidad, prefieren no recurrir a este tipo de prácticas.
De estas encuestas también se desprende otro dato curioso y es que pagar por sexo cada vez está menos relacionado a una derrota personal.
Ahora en este tipo de clientela también hay varios niveles.
También hay que tener en cuenta que las mujeres con la edad abandonan el romanticismo inicial de la juventud para ser más pragmáticas y sexuales, y esto hace también que la posibilidad de acudir a un hombre para tener sexo a cambio de dinero sea una opción que cada vez contemplan con mayor naturalidad y sin ningún tipo de tapujos. Además, el contacto con un hombre contratado también puede servir en casos de estar pasando por un momento personal delicado y no estar dispuestas a conocer a nadie.
Aunque usted no lo crea, en Morelia, la prostitución tiene todo tipo de niveles, que van desde precios por imagen, belleza, físico, cantidad de tiempo y educación, los precios de una mujer van desde los $200 pesos hasta los $4,000 por un tiempo aproximado de una hora. No es necesario tener teléfono, usted las puede encontrar en ciertos lugares de la ciudad. Sin embargo, el precio de los hombres es mucho más alto, que se incrementa tres veces a el valor de una mujer, y ¿Por qué?, porque las mujeres son mucho más selectivas que los hombres, ellas si se fijan mucho en los aspectos antes mencionados, por lo mismo, este tipo de hombres no se encuentran en la calle. Además para que una mujer pague por sexo, debe ser una mujer normalmente sin pareja, con un buen trabajo, con poder, ya sea, con su pareja o con el medio ambiente que la rodea y sin prejuicios.
En definitiva, lo que está claro es que pagar por sexo no es sólo cosa de hombres.
