Con eso de que ya no es pecado oficial ir a misa y juntarse con los curas, Pancho Garfias, mandó decir que Enrique Peña Nieto es católico declarado. Sus relaciones con los jerarcas de esa religión son buenas. El presidente electo recibió ayer a los obispos, encabezados por el arzobispo de Tlalnepantla, Carlos Aguiar Pérez, en las oficinas que tiene en las Lomas de Chapultepec. El encuentro fue privado. Nada de prensa. Solo trascendió que se abordaron las relaciones entre el próximo presidente de la República y la Iglesia Católica. No se hicieron mayores precisiones.
Para no quedarnos atrás dicen por acá vino una señora, a echarle crema a esos tacos de que va ir casi todo el gabinete estatal, quienes por cierto, desde que ROBERTO Monroy dio a conocer esa representación la gran mayoria de secretarios cn chequera ofrecieron mandas para el doce de diciembre de rodillas iran a san diego para que los lleven al Vaticano ya que por primera vez a partir del 12 de diciembre dos nacimientos y dos árboles de navidad elaborados por las manos de artesanos michoacanos van a ser presentados en el Vaticano.
Los que sienten pasos en la azotea van a pedir un milagro, los que asienten que cumplen, van a dar las gracias al espíritu santo por los favores recibidos y a que el señor papa les eche la bendición, con decirles que cinco perredistas se apuntan con gastos pagados pa que la guillotina no les corte la morra.
