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* Tan celosamente buscó guardar la táctica, que la Selección Mexicana requirió Policías para ello.
El Tri sostuvo esta mañana una práctica en las instalaciones del Club Santos, la segunda en esta ciudad y ahora con tintes mucho más serios en comparación con la de ayer en que abrieron las puertas, tuvieron alrededor de 500 aficionados apoyando y los jugadores realizaron un interescuadras recreativo.
Incluso el clima estuvo a tono esta vez, pues ahora no hubo sol y calor sofocante sino una llovizna y cielo cerrado.
Después de media hora en que los medios de comunicación pudieron observar los primeros ejercicios, el Tri cerró la puerta para trabajar a solas.
Por ello, los encargados de prensa y seguridad vigilaron las casas aledañas, al grado de requerir a un par de policías locales para timbrar en un departamento donde alcanzaron a distinguir una cámara.
Después de algunos minutos, un par de reporteros brasileños salieron sin dar la acreditación que les requerían.
Al menos durante el inicio del entrenamiento se mantuvo el misterio sobre el portero titular, luego de que hasta anoche el entrenador Miguel Herrera no había comunicado en el plantel quién será el elegido.
Fuentes del Tricolor aseguraron que eso sucedería esta mañana en la cancha de entrenamiento, donde tanto Guillermo Ochoa como Jesús Corona lucieron sonrientes, aunque el segundo fue el último en salir a la cancha, en una de las pocas señales de interpretación.
El equipo mexicano mantendrá el celo los próximos días, ya que el martes entrenará a puerta totalmente cerrada, el miércoles solo permitirá observar la primera parte de la práctica y será hasta el jueves cuando se tiene programada una conferencia del “Piojo” en Natal, un día antes del debut frente a Camerún.
