Esto de que ahora salga con que quiere vender autos, aeronaves, predios e instalaciones, es una jugada de desesperación y está dando patadas de ahogado. Todo esto porque la jugada no le ha salido como el deseaba y déjeme le explico porque.
Debemos de recordar que durante unos años el gober, le jugado la contra al ahora pejedente, desde que MALO se salió del PRD, Silvano se la ha pasado vociferando en contra del inteligentísimo dizque presidente, incluso recuerde que le apostó completamente a José Meade durante la campaña, abandonando completamente a Marko Cortés y al joven maravilla, alias Ricardo Anaya, cosa que hizo enfurecer al dirigente de Morena y de seguro le está preparando venganza, una venganza no visible, porque todo está en los dineros que manda la federación a cada Estado.
Por lo anterior y añadiendo que las finanzas del Estado están de la ching.., el gober tiene que tomar medidas desesperadas, entre que no se arregla la nómina magisterial y los recortes federales por la austeridad franciscana, está forzándolo a tomar este tipo de medidas. Y es que el, sabe que sin el dinero, el presupuesto empieza a faltar en sus programas que mermarán la poca imagen que le queda, pudiendo dejarlo solo en las siguientes elecciones o en el tambo al finalizar su sexenio por malos manejos, por esto, necesita dinero urgentemente y su única salida es vender aquello de lo cual no es dueño sino el pueblo michoacano, para subsistir y continuar armando su proyecto político.
Estas patadas de ahogado se suman a las de su partido que también se encuentra cayendo en espiral, sin prerrogativas, con deudas y sobre todo sin militantes, por todo lo anterior salió a decir que no perderá su partido en las próximas elecciones del 21. Pero, sin militantes, sin dinero para moverse y sin prerrogativas, no le queda otra más que tomar lo que pueda y no para él, sino para su proyecto y tratar de ayudar a su medio hermano que cada día ve más lejano su sueño de llegar a la silla de la gubernatura.
Todo esto lo debió de haber hecho hace años, cuando empezó, pero como se sentía protegido por Peña Nieto, no hizo caso y despilfarro el poco dinero que le quedaba libre para manejarlo a su antojo y ahora no tiene para moverse.
