Demi Moore. Está claro que Demi Moore ha conseguido descubrir el paradero de la fuente de la eterna juventud, porque a sus 51 años está mejor que cuando tenía 25. Pero claro, querer ser más joven que tus propias hijas tiene sus riesgos, y Demi se ha pasado con la dieta y hacer musculos. Unas curvas al estilo J.Lo. le sentarían de maravilla y eso solo se consigue comiendo, o inyectándote grasa corporal como Kim Kardashian.
