La participación de México en la celebración del Día Mundial de Francia concluyó cuando, poco antes de la media noche, la Torre Eiffel se vistió con las luces de colores verde blanco y rojo. Cientos de miles de personas provenientes de todo el mundo fueron testigos de la culminación de las fiestas nacionales francesas que tuvieron a México como invitado de honor, lo que nunca antes ha ocurrido, ni tampoco en América Latina. Con un impactante espectáculo de fuegos artificiales en la Torre Eiffel, cerca de las 23 horas, se apagaron las luces de la que es considerada una de las maravillas del mundo, para enseguida, vestirse con los colores de la bandera francesa, y momentos después de verde, blanco y rojo, los colores de nuestro lábaro patrio.
