MSV.- Lamentable, pero así es la realidad, porque para que los 46 empleados de confianza que entraron con el gobierno amarillista, por lógica, esos dos gobiernos tuvieron que despedir a otra cantidad igual, que por la importancia que portaron, es lógico que fueron de confianza y cada administración pública, empieza a actuar, con sus leales, no como el actual que si se ha detenido, no es porque no haya tricolores tradicionales, sino que no se tiene dinero con qué pagarles.
Lo señalados de marras su protegen con el manto del MODUC, primera tribu –que me consta-, rebasó a Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, y que por ello, pese a ver raro al hijo de mi Gral. Lázaro Cárdenas del Río, dejé de recibir pedidos de impresos que por corto tiempo me autorizaron a imprimir, no obstante que los certificados de primaria y secundaria, portaban protecciones infalsificables, porque tanto la maquinaria, como la materia de protectivos, eran producidos personalmente.
Lo anterior –me imagino-, fue porque el mismo gobernador no solamente metió al bote a diputados que ganaban dinero traficando con carros chuecos y documentaciones falsas, sino que por entonces, se vendían al mejor postor documentos escolares, principalmente por Zitácuaro, Tuxpan y tierra caliente.
Pero bueno, el asunto de hoy, es que 60 empleados de confianza que no sabemos cómo lograron ser sindicalizados y como además no los defiende el Toño Ferreira, quieren regresar a como dé lugar a lo que es gobierno, prefiriendo esto, a que les liquiden si es que tienen derechos; y que se les cumplirá, nadamás que se esperen, porque dinero, ni en las arcas, solamente en las esperanzas que del nuevo Presidente tenemos, porque parece ser un correligionario de comprensión y capacidad política, que él sabrá –como se dice de Fausto-, cómo le haga, pero a Michoacán si no le respalda, cuando menos en directo por lo del futuro del Puerto de Lázaro Cárdenas, le consigue como lo hizo Calderón Hinojosa: cien mil millones de dólares, al 0.4 de réditos anuales y a cien años de plazo para pagarlos, para que por conducto de Sí Financia, se nos puedan prestar billetes, no morrallas y ni al uno por ciento anual.
Que claro, suena inverosímil, si los bancos privados mediante el engaño del ahorro o lavado de dinero, no hablan de que los préstamos que introducen a nuestra patria, son igual a lo que Felipe hizo con los famosos cien millones de dólares, los que por rumor, llegaron tarde para reforzar la campaña electoral de Josefina Vázquez Mota.
Entonces, los que quieren amular al chango Garizurieta, simplemente están sintiendo lo que los otros sintieron cuando les dieron las gracias para que pudieran entrar a laborar éstos que hoy alegan tener derechos: ¿en política?
