Ya lo advirtió la firma financiera Nomura, cuando la cotización de Nintendo empezó a registrar unos históricos repuntes que le permitieron doblar su valor en poco más de una semana, y el viernes por la noche la propia firma lo ratificó: el impacto que Pokémon Go tendrá en las cuentas de la multinacional será limitado. La respuesta de los inversores ha sido inmediata y, al igual que ocurrió con las compras, las ventas también han sido muy fuertes. Tanto, que las acciones de Nintendo se han desplomado casi un 18% en la Bolsa de Tokyo, lo que supone su mayor caída desde 1990.Y es que, como muchos analistas han venido recordando en las últimas semanas. El máximo responsable es Niantic, una compañía que, además, está teniendo notables problemas para dar servicio a los millones de usuarios que tiene el juego. Otros expertos, en cambio, han defendido que precisamente estos problemas son los que van a hacer que Nintendo, y todos los recursos propios de un gigante de los videojuegos, tenga una mayor implicación en Pokémon Go.
Pero en todo caso, y hablando desde un punto de vista estrictamente económico, las previsiones que realiza Macquarie Securities y que recoge Bloomberg estiman que Nintendo sólo recibirá un 13% de los beneficios que genere Pokémon Go. La propia Nintendo, por su parte, no ha realizado ninguna estimación concreta pero el hecho de que no haya elevado su previsión de beneficios, aún y cuando grandes compañías como McDonalds o Primark están llegando a acuerdos comerciales con Pokémon Go, evidencia que el impacto en sus cuentas será limitado.