El próximo miércoles se acaba el periodo proselitista, y se descansan unos día para que el próximo domingo se vote. Estas elecciones son las más abundantes de la historia política de México, que además de la votación para Presidente de México, en algunos estados se vota el Gobernador, se votan diputados Federales y locales, senadores, además de los presidentes municipales. Además por primera vez los presidentes municipales y diputados locales ya puede reelegirse. Se espera que el porcentaje de votantes sea de alrededor de 45%, es decir, de los 89 millones de mexicanos que pueden votar solamente votarán 40 millones de ellos. Se acaban los spots o anuncios en Internet, Televisión, Radio y periódicos, después de habernos bombardeado por más de 6 meses.
Ahora viene un momento de reflexión donde supuestamente se le permite a los habitantes pensar por quién votarán, pero las estadísticas dicen que para este tiempo alrededor del 85% de la población ya tomó una decisión y conoce por quién va a votar y que no cambiará de opinión.
Para Morelia y Michoacán, que se ha bañado de sangre por la muerte de varios candidatos, la joya de corona es la capital del Estado, donde será una carrera de tres, desplazando a varios candidatos, sin duda alguna, el fracaso del proyecto independiente ha hecho que tantos candidatos compitan ne esta ocasión. El sueño independentista, creo una gran expectación sin resultados que después de tres años abrió los ojos de la población. La soberbia de este tipo de políticos de segunda, ha creado una gran inseguridad en el territorio capitalino, la falta de economía por la baja creación de empleos ha hecho que mucho personal capacitado busque opciones fuera del Estado y el gran incremento de corrupción ha dado pie que se le odie a tanto burócrata sin escrúpulos.
