Integrantes de la Comisión Reguladora del Transporte pusieron un ultimátum a su dirigencia y establecieron que, «si en el transcurso de este mes el gobierno del estado no autoriza una nueva tarifa en el servicio de transporte urbano y suburbano, los transportistas adheridos a esta organización comenzarán a cobrar el nuevo monto; ya tenemos el agua hasta el cuello, sube la gasolina, combustibles y canasta básica» dijeron.
En asamblea general que se llevó a cabo en esta localidad con transportistas de todo el estado, los afiliados reclamaron la lentitud del gobierno estatal para autorizar la nueva tarifa pese a que ya se entregó la información que sustenta esa decisión.
José Trinidad Martínez Pasalagua, dirigente de CRTM por su parte, advirtió que las finanzas de los transportistas ya son de números rojos, pues la actividad está dejando de ser rentable y las unidades se están deteriorando cada vez más ante la falta de recursos para darles un adecuado mantenimiento.
Dijo que también cientos de transportistas están endeudados, pues adquirieron a crédito unidades nuevas y ahora no las pueden pagar por la nula rentabilidad del transporte concesionado.
Avalando la decisión de los hombres del volante, Martínez Pasalagua estableció, «hemos estado insistiendo con las autoridades de que ya se autorice la nueva tarifa y no toman la decisión, por lo que nosotros actuaremos por nuestra cuenta ya que la situación es insostenible» dijo.
También y en relación a la amenaza de que la Cocotra puede detener las unidades de la CRTM, los dirigentes y transportistas presentes subrayaron contundentes, «advertimos a la dependencia que, si llega a detener alguna de nuestras unidades, inmediatamente paralizaríamos todo el transporte en el estado; no vamos a permitir que se nos perjudique más de lo que hasta ahora han hecho».
