El jefe del Ejecutivo estatal afirmó que en el transcurso de su primer año al mando se enfocó en liberar a Michoacán de las diversas crisis que lo mantenían en una situación crítica: con altos niveles de inseguridad, problemas financieros graves y falta de gobernabilidad.
Alfredo Ramírez Bedolla, el gobernador de la entidad, resaltó que, al haber cumplido cuatro años desde su llegada al gobierno, está protagonizando “la mayor hazaña pacífica de la historia moderna, ya que la Cuarta Transformación de Michoacán representa un proceso histórico en evolución”.
Durante su intervención ante el Congreso del Estado, en el marco de su Cuarto Informe de Gobierno, Ramírez Bedolla subrayó que después de cuatro años en su cargo, puede afirmar que su elección fue un mandato del pueblo de Michoacán, con el objetivo de erradicar la corrupción, la frivolidad y el abuso que durante un prolongado período habían controlado las instituciones.
El mandatario afirmó que este periodo de cuatro años es ideal para llevar a cabo un análisis de lo planificado. Indicó que durante el primer año, su administración se dedicó a rescatar a Michoacán de las crisis severas que lo ahogaban: inseguridad, quiebra financiera y caos en la gobernanza.
Prosiguió diciendo que durante el segundo año, “como mencionó nuestro estimado presidente Andrés Manuel López Obrador, luchamos por recuperar el derecho a la esperanza”, además de estabilizar las finanzas y dar inicio a la identificación de la inversión social más significativa en la historia de Michoacán, a partir de lo cual se estableció la visión de este gobierno.
“Este sexenio se distingue por su legado más relevante: la infraestructura pública, como un modelo de desarrollo y justicia, ya que sostengo que en los últimos cincuenta años no se había implementado un programa de inversión social tan trascendental”.
Por ello, el gobernador estatal expresó que mediante “Michoacán Construye” se desmanteló la falacia de que el estado carece de recursos y es pobre para ejecutar obras públicas; que sin el respaldo federal o incubando deudas no se podría realizar nada.
“Hoy, estamos construyendo más que nunca, utilizando recursos estatales y sin incurrir en deudas. Por esta razón, con transparencia, podemos afirmar que en Michoacán no había escasez de dinero, sino un exceso de corrupción”.
Defendió un desarrollo que sea ético desde el punto de vista ambiental y que al mismo tiempo promueva la justicia económica redistributiva, “por esta razón, afirmamos que no se trata de apartar a los empresarios, sino de trabajar en conjunto con ellos”.
“En la actualidad, estamos construyendo un estado de bienestar que sitúa la dignidad humana en el centro; que busca la reconciliación entre los gobiernos y su población, que reconoce a los pueblos indígenas, garantiza una educación de calidad y fomenta la paz, abordando sus causas”.
Subrayó que, con una inversión superior a los 40 mil millones de pesos y sin crear deuda pública, Michoacán está llevando a cabo el programa más ambicioso de su historia, con la realización de obras como los teleféricos de Morelia y Uruapan, así como hospitales y nuevas carreteras.
Además, destacó la rehabilitación de más de mil 300 kilómetros de la red de carreteras del estado, asegurando su mantenimiento hasta el año 2027.
Igualmente, abordó las iniciativas vinculadas con la recuperación y conservación del lago de Pátzcuaro, que incluyen la plantación de 3. 5 millones de árboles en la cuenca y la rehabilitación de 40 manantiales.
En el ámbito de la educación, afirmó que Michoacán se erige como un modelo a nivel nacional en la lucha contra el rezago educativo, gracias a la asignación de más de 2 mil millones de pesos para infraestructura, remuneraciones puntuales a docentes y la culminación de 3 ciclos escolares completos.
