Durante la precesión del Señor de la Misericordia, celebrada en la colonia El Porvenir, en esta capital, un cohetón le estalló en la cara a un niño de tres años de edad, quien sufrió algunas heridas y terminó con el pelo chamuscado.
Fue revisado por los Bomberos Morelia (BM) y al final sus padres se lo llevaron consigo ante la falta de ambulancias, así informaron las autoridades policiales.
Todo ocurrió la mañana de este ayer, en la esquina de las calles Santos Degollado y Mandarina. Se conoció que un adulto llevaba los explosivos y los arrojaba al andar de la caravana religiosa.
No obstante, de pronto uno de los cohetones arrojados no se elevó y acabó por tronar junto al rostro del pequeño.
Al registrarse el accidente los fieles se aproximaron al chiquillo para ayudarlo. Estaba aturdido, tenía algunas quemaduras en la cara y el pelo quemado. La gente llamó a los servicios de rescate y llegaron los BM, quienes le brindaron la atención prehospitalaria.
Fuentes de la Policía narraron que se pidió una ambulancia al C4-Michoacán, pero los despachadores mencionaron que no había ninguna disponible en esos momentos. Fue así que los papás del niño se lo llevaron a un doctor por sus propios medios.