MORELIA, Mich.- Las nueve entidades que registran una tendencia creciente de homicidio de mujeres son Chiapas, Chihuahua, Distrito Federal, Durango, Guerrero, Michoacán, Oaxaca, Sinaloa y Sonora, según un estudio presentado por la subsecretaria de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Lía Limón, en el Senado de la República.
De acuerdo a una nota de Vanguardia, el “Estudio nacional sobre las fuentes, orígenes y factores que producen y reproducen la violencia contra las mujeres”, elaborado por la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia Contra las Mujeres (Conavim), reporta que en México únicamente 33% de las mujeres han vivido libres de violencia y, por poner un ejemplo, 27% de las mujeres indígenas que acudieron al servicio público de salud fueron esterilizadas sin su consentimiento.
“La violencia representa un continuum; es decir, la misma persona puede ser objeto de violencia en la infancia, en su pareja, en el espacio escolar, laboral o violada. Eso parece importante, hay que invertirle para saber por qué, no sólo desde el punto de vista psicológico, sino social”, comentó la socióloga Florinda Riquer.
Y alertó que en el occidente de la república mexicana las mujeres guardan silencio:
“Jalisco, Aguascalientes, Guanajuato o Querétaro hay una mayor presencia de silencio frente a la violencia, en una suerte de complicidad entre instituciones médicas, la propia Iglesia, donde se trata de que la mujer no hable ni de la violación u otro abuso para defender el honor de mi marido”.
Revisión de valores
Al hacer la presentación, Lía Limón hizo referencia a las declaraciones del alcalde de Acapulco, Guerrero, Luis Walton, en relación a que muchas mujeres, además de las ciudadanas españolas, sufren abuso sexual cotidianamente.
“No podemos nadie de ningún color, de ningún poder, de ningún grupo de la sociedad, permitir que hablemos de violaciones sexuales y abusos a mujeres, como algo normal, es deber de todos evitar el prohibir que cualquiera se atreva a hablar de violaciones de mujeres como un hecho normal o que sucede cotidianamente, una sociedad que permite algo así tiene que revisar los principios y valores de las bases de donde se construye”, dijo.
Tasas de mortalidad
El estudio presentado en el Senado revela que a partir de 2008 las tasas de homicidio repuntaron de “manera abrupta”, y en cuatro años alcanzaron niveles de hace tres décadas. Roberto Castro, coordinador nacional del estudio, comentó que encontraron que las tasas de mortalidad por homicidio son más altas para mujeres en los grupos extremos de edad. Entre las niñas menores de cinco años representan 7.4% del total de feminicidios; mientras que en mujeres de 75 años y más representan 5.3%.
“Proporcionalmente se asesina más a niñas y, si me permiten la expresión coloquial, a viejitas que a mujeres, que a niños y ancianos”, explicó.
El incremento de las causas de muerte de las mujeres más significativo entre los años 2001 y 2010, por ejemplo, se registra en la distribución de muertes de mujeres por ataque con armas de fuego y explosivos.
“Hay indicios de las causas de homicidio más crueles y más dolorosas”, manifestó Roberto Castro.
Hasta 2008, en 20% de los municipios con más de 100 mil habitantes no registraban homicidios de mujeres, y en tan sólo tres años, ese porcentaje se redujo a 10%, a lo que el estudio llama “efecto contagio”.
La presentación del libro fue organizada por la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, Angélica de la Peña, del Partido de la Revolución Democrática (PRD).