Ante unos 20 mil sacerdotes religiosos, consagrados y seminaristas, el Papa Francisco inició la misa en el Estadio Venustiano Carranza de Morelia, Michoacán pidiéndoles no caer en la tentación de la resignación, ni la perdida de la memoria y les llamó a evangelizar no por gloria, sino por necesidad.
Ante unos 20 mil sacerdotes religiosos, consagrados y seminaristas, el Papa Francisco inició la misa en el Estadio Venustiano Carranza de Morelia, Michoacán pidiéndoles no caer en la tentación de la resignación, ante la violencia, la corrupción, el tráfico de drogas, el desprecio y la precariedad.
Les pidió no caer en la tentación de la resignación, ni la perdida de la memoria y les llamó a evangelizar no por gloria, sino por necesidad.
“Ay de nosotros consagrados, consagradas, seminaristas… ay de nosotros si no compartimos de lo que somos testigos, de lo que hemos visto y oído, ay de nosotros… No queremos ser funcionarios de lo divino. No somos ni queremos ser nunca empleados de la empresa de dios porque somos invitados a participar de su vida…”, declaró en su homilía. Con inf. de Radio Fórmula
