El gobernador de Michoacán, Silvano Aureoles Conejo, se pronunció a favor de reducir la “rigidez” que presentan los lineamientos de evaluación docente, aplicados a través de la Reforma Educativa, a fin de establecer acuerdos con la disidencia magisterial.
El mandatario estatal detalló que los procesos de evaluación docente difieren en muchos sentidos, pues resaltó que las condiciones no pueden ser iguales para un mentor que labora en estados como Michoacán o Oaxaca, que las de aquellos que operan en Nuevo León o el Estado de México.
Sin embargo y pese a los acuerdos que se pudiesen llegar a concretar con la CNTE, el mandatario recalcó sobre aquellos docentes que han vulnerado la legalidad del estado no puede se puede perdonar para derogar la Reforma Educativa.
Pese a que la posición radical se mantiene en el magisterio, descartó que el Gobierno de Michoacán vaya a recurrir al uso de la Fuerza Pública en la recuperación de vehículos retenidos por estudiantes normalistas.
Dejó en claro que el diálogo imperará en las negociaciones que se entablen con el magisterio, a fin de que esta problemática se diluya mediante una vía diplomática y no a través del uso de la Fuerza Pública.