* Al final del encuentro todo se salió de control y hubo invasión de aficionados.
* Aficionados de la Jaiba agredieron a la afición rival, se saltaron a la cancha y hasta quisieron robar el trofeo.
La derrota de la Jaiba Brava del Tampico Madero en la Final por el Ascenso ante Potros de la UAEM derivó en severos actos de violencia en el Estadio “Tamaulipas”, como invasión de cancha, agresión a la afición visitante, intento de robo del trofeo de Campeón y hasta la cancelación de la ceremonia oficial de premiación al equipo que logró el ascenso, cuadro que debió huir despavorido a su vestidor ante tales incidentes.
Ante la invasión y agresiones a aficionados visitantes en los palcos del inmueble, las autoridades locales y la seguridad privada contratada por el club se vieron totalmente rebasadas, al grado de que, pese a que hubo una invasión masiva de aficionados, solamente hubo un saldo de dos aficionados detenidos.
Todo comenzó cuando los futbolistas de Potros de la UAEM comenzaron a festejar al finalizar los 90 minutos, y enseguida, aficionados de la “Jaiba Brava” invadieron el campo y comenzaron a agredir a aficionados en los palcos del inmueble. Al percatarse de los hechos, jugadores del cuadro Campeón corrieron a su vestidor a resguardarse, la ceremonia de premiación se suspendió por unos momentos y terminó por ser cancelada.
En medio del caos, algunos aficionados de los que invadieron el terreno de juego buscaron agredir a los futbolistas del cuadro del Estado de México, mientras que en algo inaudito, otros tantos intentaron robarse el trofeo de Campeón.
Después de un buen rato los futbolistas e integrantes de la delegación de Potros de la UAEM todavía no podían abandonar el estadio, por temor a represalias.
La Federación Mexicana de Futbol todavía no manifiesta alguna postura con respecto a semejantes brotes de violencia y su única reacción hasta el momento fue en sus redes sociales, donde felicitaron al cuadro de Potros de la UAEM por su ascenso, pero nunca se hizo referencia a los hechos, ni se reprobó a la violencia vivida en Tampico.