MSV.- En realidad lo que inquieta es la inseguridad en que se vive, lo de la política lo resuelve el Poder Legislativo, en función de que éste otorgó un permiso y es el único que puede acatar o acordar algo, que de acuerdo a como convenga más a los que directamente representa, que es el pueblo que también los eligió por medio del sufragio, será quien al resolver la notificación de que regresa quien estaba gobernando diga si sí, el por qué no o que conviene que siga en su recuperación o de plano, que la situación de Michoacán no lo permite, porque basta saber que después de haberse publicado en el Periódico Oficial, hay otro acuerdo, donde ya desaparece la palabra interino y queda solamente gobernador.
Quien trabaja, y no saca nada de la política, no ha abandonado su forma de ganarse la vida, primero es su trabajo y no ha dejado de hacerlo, por pedir que esté alguien en específico.
Nadie, hasta ahora, se ha quejado de haber sido perjudicado porque alguien que el Congreso del Estado tuvo que designar para sustituir a quien pidió permiso para curarse, como también no lo habrá quien sea perjudicado por el hecho de que regrese el que obtuvo licencia para atender su salud, a menos que se trate de los que se tuvieron que cambiar para que el actual gobernador ejerciera totalmente su modo de gobernar.
El señor licenciado Fausto Vallejo Figueroa tiene todo el derecho al haberse curado, de responder a la decisión que el pueblo tomó por llevarlo al gobierno, pero si las condiciones en Michoacán son motivo de alguna modificación, que se sepa, el único quien decide, es el Poder Legislativo.
El hecho de que se diga que ahora ha desaparecido el presidencialismo porque es el Congreso de la Unión quien lo sujeta, es verdad, pero las decisiones políticas no son por orden escrita, sino por coincidentes intereses de quienes hacen la política del país, que son las fuerzas que representan los partidos políticos, mismos que facultan al través de los gobiernos que tienen en la república, que sus senadores, que son sus directamente representantes en ese poder legislativo federal, determinar si fuera necesario, de acuerdo a las condiciones en que está una entidad, si hay o no cambio de gobierno.
Aquí queda claro, que los que quieren otro Ejecutivo es por interés; como también los que sienten que no es necesario, por su estado económico y nuevamente otros cambios direccionales que representan más inquietudes puramente políticas, por lo que se viene enseguida, que francamente no habrá tiempo para beneficios a la entidad
Ahora que si por la presencia del gobernante electo iba a desaparecer el estado de inseguridad en que estamos y especialmente seis de los municipios que viven en la zozobra, que si con eso se volviera a la paz y tranquilidad, malaya si no salíamos todos a las calles a solicitarle al Congreso, que no espere a la notificación, sino que le cancele la licencia y que se ponga a trabajar, porque eso de esperar a arreglar dos que tres asuntillos, es mucho tiempo, porque puede ponerse de moda el adagio de veremos dijo un ciego…
