* Sedru, a través de sus técnicos extensionistas orienta a las y los productores ganaderos de la brucelosis bovina al ser una enfermedad zoonótica y que afecta el comercio internacional.
La Secretaría de Desarrollo Rural (SEDRU), encabezada por Eugenio C. Treviño García, en su búsqueda constante por capacitar, orientar e informar a las y los productores agropecuarios, acuícolas y pesqueros, en cada una de sus 10 delegaciones regionales cuenta con técnicos extensionistas, encargados de incrementar la producción mediante servicios de extensión e innovación, buscando el desarrollo de las capacidades productivas, organizativas y humanas de las mujeres y los hombres del campo michoacano.
En este sentido, José Luis Sánchez Castañeda, técnico extensionista de la SEDRU, en el municipio de Queréndaro, informa constantemente a las y los productores y a la ciudadanía en general sobre la prevención, diagnóstico y control de la brucelosis, por ser una enfermedad de tipo zoonótica de los bovinos, ovinos, porcinos y caninos, siendo un problema para la sanidad animal y el comercio internacional; además del grave riesgo que se presenta para el hombre por ser una zoonosis.
Esta enfermedad se ubica intracelularmente donde no penetran los antibióticos, se produce por un bacilo aerobio gramnegativo, mismo que puede destruirse por ebullición o pasteurización de la leche, productos lácteos, en las heces, orina, fetos abortados, placentas y terneros aparentemente sanos, de vacas infectadas.
Sánchez Castañeda expresó que la brucelosis en los animales puede contagiarse a través del consumo de pastos o de aguas contaminadas por placentas; líquidos placentarios u otras secreciones de vacas infectadas; alimentación de terneros o animales de otras especies con leche de vacas infectadas; contacto de animales sanos con secreciones y excreciones de animales brucelósicos; inseminación artificial por semen contaminado con la bacteria.
En el ser humano se contrae a través de consumo de carne y leche cruda o derivados lácteos sin pasteurización, provenientes de animales infectados.
Asimismo informó que los principales signos de la enfermedad en los animales son: aborto en el último tercio de la gestación y orquitis en machos, además, con los exámenes de laboratorio es posible confirmar el diagnóstico de brucelosis; en forma directa con pruebas serológicas que confirmen la presencia de anticuerpos en suero sanguíneo o leche.
En el caso del ser humano se puede presentar dolor de cabeza; fiebre; sudoración; dolores articulares y musculares, tos, expectoración y estreñimiento, entre otras.
Para prevenir la brucelosis bovina hay que vacunar a todas las terneras entre los tres y ocho meses de edad, con las vacunas autorizadas como el Cepa 19 o Cepa RB 51; hacer exámenes periódicos a los hatos, para conocer el estado sanitario de los animales; adquirir animales de ganaderías certificadas como libres de brucelosis, o en su defecto que hayan sido previamente examinados y con resultados negativos a brucelosis; desinfectar corrales ganaderos; y pasteurizar los productos lácteos, concluyó Sánchez Castañeda.
