Mucho se ha dicho del programa de útiles y uniformes escolares gratuitos, pero la verdad es que el Gobierno Estatal no tiene para esto, simplemente ¡NO HAY DINERO!. Y si no hay dinero para el que invierte en el Estado menos hay para el que sólo recibe. Se ha dicho que se licitará desde SEPSOL, pero esta dependencia no tiene presupuesto asignado, ni como sobrevivir tampoco.
Por lo que a través de un esfuerzo de los proveedores de uniformes y papelerías se podrá llevar a cabo el programa, pero solamente con un anticipo y con la buena y creíble palabra del Gobierno de que se les va a pagar algún día, así es que si usted quiere entrarle y financiar al Gobierno Estatal, pues ya viene el próximo mes el compromiso.
El dinero del anticipo, para adquisición de la gratuidad de estos artículos, saldrá de las economías de la Secretaría de Educación en el Estado y la cual está quebrada, ellos no tienen ni para sueldos a partir de octubre. El Gobierno se comprometió a que a más tardar en septiembre se entregarán los uniformes y útiles escolares en las zonas de mayor marginación y de ahí en adelante se continuaría con el programa a otras zonas del Estado, ¡Ojalá!.
La verdad es que es un riesgo para todos, para el Gobierno porque el ciclo ya empezó y los padres tratarán de hacer negocio con estos artículos, porque ya invirtieron en eso, para la Tesorería del Estado porque no hay presupuesto en el cajón que le corresponde este tipo de programas y si lo que están haciendo en este momento es ordenar, entonces desordenarán la economía de nuevo, para la Secretaría de Educación, porque utilizarán dinero para otra cosa que no sea en los sueldos preciados de los maestros democráticos, para la población, porque será una licitación de asignación directa, llena de compromisos y corrupción, porque al Gobierno le urge que salga este programa y no hay tiempo, para los papeleros o proveedores de este programa, porque lo único que tendrán es el compromiso que algún día les pagarán la totalidad y por ahorita solamente habrá anticipos, y para los niños que nunca tuvieron esos incentivos por mal manejo de las administraciones pasadas.
Así es que el programa de gratuidad de material escolar será un fracaso, con buenas intenciones, pero un fracaso.
