La diputada Selene Lucia Vázquez Alatorre, conminó este jueves al gobierno del estado y al propio Poder Legislativo a tomar un papel proactivo ante la serie de problemas que enfrenta la entidad y “dar la cara” para coadyuvar a la pronta solución de los mismos. Al hacer una crítica a la actitud mostrada hasta ahora por las autoridades gubernamentales ante problemas sociales como los surgidos en Cherán, Nahuatzen, los despidos masivos e injustificados en la Auditoría Superior del Estado (ASEM) y las comunidades indígenas de Paracho y Salvador Escalante, la legisladora independiente dijo que el gobierno del estado no puede convertirse en el gobierno del NO y soslayar su compromiso con los michoacanos, “amparados en una negativa sistemática e institucional”. Este gobierno, el de Fausto Vallejo y el Jesús Reyna, “han mostrado lentitud que no parece casual; han sido poco creativos y yo diría que hasta pasivos y totémicos. Ni con los movimientos sociales a lo que se somete a semanas enteras de desgaste antes de instalar una mesa de diálogo, ni con la conflictiva comunitaria o municipal han mostrado sensibilidad”. En todo caso, dijo, “el Congreso no tiene por qué tomar esas mismas actitudes y como representantes populares –conminó- tenemos que oír a todos y resolver los problemas sin dilación”. En el gobierno del estado, acotó, “hay voces que nos quieren convencer de que lo que está mal es normal. Han minimizado siempre la situación y la federación distraída, se olvida de que una herida mal atendida suele infectarse y extenderse, poniendo en riesgo la salud del cuerpo entero, es decir de la nación”. Para la diputada, quien este jueves no pudo subir a tribuna a dar un posicionamiento por la suspensión de la sesión ordinaria, no es exagerado decir que Michoacán ha sido herido, lastimado y menospreciado de muchas maneras en los últimos tiempos, con daños incuantificables que han disminuido el potencial de la entidad. En este sentido hizo hincapié en un fenómeno que empieza a ser común: la desinformación, la difusión de información errónea o parcial, y la falta de comunicación entre autoridades locales y estatales, que toman como ciertos sucesos que no son verificados o están equivocados, “pero que contribuyen a crear un clima de desconfianza y violencia”. Llamó entonces a los medios de comunicación a no contribuir a divulgar versiones de los grupos criminales “a fin de no confundir a la población o incluso ponerla en un riesgo mayor”. Y es que acotó, estás (informaciones) provocan reacciones de funcionarios que a su vez declaran, califican o descalifican hechos, basados en supuestos, rumores o información sin sustento que tienen conllevan una intencionalidad, pero que ponen en peligro la integridad de la gente. La Ruana, la tenencia de Carrillo Puerto en Buenavista Tomatlán, Tepalcatepec, Apatzingán, Nueva Italia, Tumbiscatío, Arteaga, Lázaro Cárdenas y más recientemente Coalcomán, “merecen más que una reflexión de este Congreso y sus diputados y merecen que participemos juntos y del lado de la población en coordinación con todas las instancias en la solución que garantice seguridad a la ciudadanía. Finalmente reconoció que el estado atraviesa por una crisis, pero llamó a los integrantes de la LXXII Legislatura a no ignorar los problemas y asumir con valentía su responsabilidad de diputados, como representantes de los ciudadanos.