En Michoacán alrededor de 170 mil votos fueron comprados por el PRI para favorecer al candidato presidencial, Enrique Peña Nieto. De acuerdo a las pruebas documentadas y los testimoniales recabados por integrantes del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y los partidos coaligados en el Movimiento Progresista (PRD, PT y Movimiento Ciudadano), queda comprobado que hubo irregularidades en la elección del 1 de julio que pueden desembocar en la anulación de la elección presidencial.
Esta mañana en la plaza Benito Juárez se instalaron las mesas receptoras mediante las que los ciudadanos llevan pruebas y testimonios de los hechos acontecidos previo y durante la jornada electoral. Asimismo, se recaban firmas ciudadanas para demandar la anulación de la elección porque se violó el artículo 41 constitucional que establece que las elecciones deben ser libres y auténticas.
Y es que en la jornada que se desarrolla este día los ciudadanos han entregado tarjetas telefónicas entregadas por el PRI para realizar llamadas telefónicas, asimismo han explicado la forma en cómo el Partido Revolucionario Institucional coaccionó el voto obligando a los electores a sufragar por Peña Nieto.
Comprometidos con la democracia y la legalidad el PRD continúa documentando las anomalías ocurridas, antes y durante la elección, que consisten en: compra de voto, rebase de tope de gastos de campaña, inequidad en medios, manipulación de encuestas y dinero ilícito.
Es importante destacar que las pruebas correspondientes se han presentado ante la autoridad electoral, y esperamos que proceda conforme a derecho y se limpie la elección.
En esta jornada informativa, denominada juego limpio que se desarrolla de manera simultánea en las capitales de todos los estados del país, están participando ciudadanos, integrantes del PRD y miembros de Morena, todos con la firme convicción que el Tribunal Federal Electoral actúe conforme a derecho y se anule la elección presidencial.
